Dado que el nitrógeno es un gas inerte, a menudo se utiliza para excluir o empujar el oxígeno hacia fuera de determinadas áreas, paquetes y contenedores. Los productos farmacéuticos no son una excepción. El nitrógeno se introduce en el embalaje de diversos medicamentos para prolongar su vida útil y garantizar su calidad e integridad. El nitrógeno también se utiliza en la impresión digital de envases farmacéuticos. Tener un generador de nitrógeno es ideal para el envasado farmacéutico. Permite la producción in situ de un suministro fiable de nitrógeno, lo que elimina cualquier dependencia de proveedores externos. Un generador de nitrógeno in situ también evita el tiempo de parada y garantiza que la pureza de nitrógeno necesaria (99,999 % en esta aplicación) esté fácilmente disponible.
En muchas instalaciones farmacéuticas o médicas, ciertas áreas se cubren con nitrógeno para forzar la mayor parte del oxígeno. El nitrógeno, por tanto, reduce en gran medida el riesgo de combustión y fuego, y evita la oxidación de los productos y equipos.
Los laboratorios utilizan nitrógeno para procesos más complejos, como el análisis y el transporte de determinados productos químicos. La cromatografía es una técnica analítica de laboratorio para separar una mezcla. Se utiliza para establecer la presencia o proporciones relativas de analitos (muestra de interés) en una mezcla. La cromatografía líquida (LC) es una técnica de separación en la que la fase móvil es un líquido. La cromatografía líquida se combina a menudo con otro proceso denominado espectrometría de masas (MS). Se trata de una técnica química analítica que ayuda a identificar la cantidad y el tipo de partículas y moléculas presentes. La combinación de estos dos procesos se conoce como LC-MS. El nitrógeno se utiliza durante 3 fases durante la LC-MS:
Este proceso de LC-MS requiere un mínimo de 95% de pureza de nitrógeno y, en ocasiones, hasta un 99%. La calidad del nitrógeno es beneficiosa en este proceso, ya que las impurezas de los gases pueden comprometer la precisión del análisis. También pueden causar grandes inexactitudes y problemas con el equipo analítico. El nitrógeno reduce significativamente los niveles de oxígeno y agua, prolongando así la vida útil de las columnas de cromatografía. Esto ahorra costes de sustitución de columnas y tiempo de inactividad.
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