Resultados superiores en cada etapa
Tanto el N2 como el CO2 son gases inertes que se pueden utilizar para lavar, purgar, infundir y envasar cerveza. Sin embargo, para muchos procesos (excepto para los requisitos de carbonatación), el Nitrógeno es la solución preferida para las fábricas de cerveza. Algunas fábricas de cerveza prefieren el N2 al CO2 para nitrogenar su cerveza, ya que crea una textura más suave con burbujas finas. Además, dado que el CO2 es altamente soluble en la cerveza, podría introducir un exceso de carbonatación.
Desde el punto de vista empresarial, el Nitrógeno puede ofrecer un enorme ahorro de costes. Es mucho más barato que el CO2 y no está sujeto a los precios volátiles del CO2. El CO2 también tiende a experimentar problemas en la cadena de suministro, lo que deja a las fábricas de cerveza sin el gas inerte que necesitan. Un generador de Nitrógeno in situ elimina este obstáculo para la producción.