¿Cómo obtener nitrógeno de grado alimentario?
Hay dos formas de obtener nitrógeno de grado alimentario. Uno es comprarlo a un proveedor. Sin embargo, esto es caro y tiene varias otras desventajas: plantea desafíos logísticos y podría provocar cuellos de botella en el suministro. Además, los contenedores de nitrógeno pesados y presurizados suponen un riesgo para la seguridad laboral.
El segundo método es generar nitrógeno in situ. Esto es mucho menos costoso, garantiza un suministro constante y le permite elegir la pureza de nitrógeno requerida.
Para la generación de nitrógeno in situ, necesita un generador y un compresor. Este último comprime el aire ambiente y lo envía al generador, que separa el nitrógeno de todos los demás gases, especialmente el oxígeno. Dado que el aire siempre contiene contaminantes, es esencial filtrarlos en una fase temprana de este proceso. De lo contrario, reducirán la calidad y la pureza del nitrógeno y entrarán en contacto con los alimentos.
Esto significa que un tratamiento eficaz del aire es la clave para mantener el nitrógeno puro. De hecho, varias organizaciones han identificado el aire comprimido utilizado en el procesamiento y el envasado como una posible amenaza para la seguridad del aire alimentario. Entre ellos se incluyen la Organización Internacional de Normalización (ISO), el Instituto de Calidad Alimentaria Segura y el British Retail Consortium.